Pues resulta que aún tengo muchos pensamientos atorados sobre The Magicians. Que comience la verborrea (libre de spoilers).

Empezaré esto diciendo que se trata de mi cebo ideal. ¿Una extraña combinación de Urban Fantasy, Portal Fantasy y Epic Fantasy protagonizada por millennials estudiando magia aunque no tengan tiempo para andar estudiando en una escuela superior especializada en la enseñanza de ésta localizada en Nueva York? Tan sólo con esa información ya tendrían toda mi atención, pero además tenemos a estos mismos personajes descubriendo que la tierra mágica de los libros de su infancia es real, y es como si uno descubriera que la mismísima Narnia es real (porque Fillory y los libros de Fillory claramente son un grandísimo guiño a Narnia).

Después de ver las temporadas 1-3 decidí darle una oportunidad a los libros, con los que tuve una relación más bien negativa pero aún así después de leerlos en digital y español me hice con el box set en inglés porque #trash, y el releer el primer libro en físico me sirvió mucho para llegar a la conclusión de que sí, hay muchas cosas que no me agradan de estos libros, de su historia y personajes; pero creo que la razón por la que en su momento me molestaron a sobremanera es porque la idea me gusta. Me gusta mucho. Y afortunadamente los creadores de la serie fueron capaces de ver ese potencial y ofrecer algo bastante similar y distinto a la vez, algo que emociona. Así es como haces una buena adaptación. Y en este punto, estando en una cuarta temporada, ya se expandió y salió totalmente de la cronología y los límites de las novelas, pero aún así de vez en cuando se siguen rescatando elementos o escenas destacables de éstas, lo que de alguna forma encuentro muy gratificante.

Por otro lado, una cosa que me llama muchísimo la atención de la serie es que constantemente me siento desafiada por ella; esto en el sentido de que me lleva a cuestionar una y otra vez el uso y tratamiento de ciertos tropos y caracterizaciones, tanto positiva como negativamente. Con las novelas me es muy fácil decir que son más las cosas que no me gustaron y punto final. Pero cuando se trata de la serie no es tan sencillo porque en ella se le da verdadera continuidad a las cosas (tanto a las adaptadas de la fuente original como a las nuevas aportaciones) de una forma que te puede hacer cambiar de opinión o al menos ofrecerte una nueva perspectiva sobre ciertas decisiones cuestionables. Y de algún modo es cuestionarte todo de nuevo.

Y esto es posible porque, naturalmente, al hablar de la serie hablamos de una narrativa más dinámica, inacabada pero continua, porque cosas/plot points pertenecientes a otras temporadas pueden seguir teniendo repercusión en la actual e incluso en la siguiente. Sera Gamble (co-creadora de la serie) comenta la filosofía que siguen los escritores: "No nos gusta... cuando sucede algo enorme y luego simplemente se borra.  Cuando la gente continúa como si no hubiera pasado. Estamos interesados en, a través del tiempo, tener a estos personajes creciendo y cambiando... en verlos en situaciones que están muy informadas por las cosas que han pasado y que la audiencia ha visto" (x). Y gracias a dios se nota.

Y hago un paréntesis para decir que gracias a ello he caído en la cuenta de que estas son las historias que verdaderamente me atrapan: las que no olvidan el pasado y sus raíces, las que no pasan a otra temporada y borrón y cuenta nueva, una nueva storyline y vámonos, al final haciendo que pierda el interés tras unas cuantas temporadas porque para entonces ya nada se siente conectado con nada y los personajes no presentan cambios significativos; y si lo hacen sucede de manera rápida y forzada, y tras ello todo es monótono, siempre lo mismo. (Aunque no por ello estoy diciendo que las series que hacen esto sean malas, a veces se antoja eso, y a veces se antoja algo más).

Pero no todo es miel sobre hojuelas. Tengo varios problemas con esta serie, y el mayor de ellos en cuanto a trama reside y siempre residirá en lo que sucede con Julia al final de la primera temporada (yep, siempre me salto esa parte al hacer mis rewatcheos), hecho que en los libros sucede al final de la segunda entrega. Sé que esa es una de las razones por la que muchos se decepcionaron y no continuaron viendo más allá de eso, y lo entiendo perfectamente. Y podría decir que a partir de cierto punto se deja de caer en lugares así, pero incluso en la temporada actual me sigo encontrando con cosas que me hacen fruncir el ceño, como fue el cuarto episodio con la situación Margo-Josh (no el hecho de que haya pasado, pero sí el cómo/bajo qué circunstancias se dio).

Lo que quiero dar a entender con todo lo anterior es que es una serie que disfruto mucho ver, incluso creo que ya está bien posicionada entre mis absolutas favoritas (sí, justo a lado de Doctor Who y Avatar), pero eso no significa que ignore sus problemas; si bien ya no los veo tanto como algo puramente negativo, pues precisamente ese constante poder generar discusión, cuestionar y reflexionar sobre diversos aspectos es una de las razones por las que me atrae tanto, prueba de ello que esté escribiendo esto y que esta no sea la primera entrada que hago sobre ella (aunque en buena medida sí me complica la decisión de recomendarla o no; pero con todo les puedo asegurar que temporada tras temporada mejora y sube la vara en cuanto a guion, storytelling, subversión de tropos/clichés del género fantástico, representación, desarrollo de personajes, darte los más jugosos de los feels y ships... y en ese sentido sí creo que merece más popularidad y reconocimiento. Y supongo que básicamente esa fue una recomendación).

"As someone born in 1902, I find a heterosexual white male hero very relatable" #gold

Pero eso de ver y cuestionar por gusto bien podría hacerlo con cualquier otra serie de naturaleza similar, mas no sería lo mismo si no encontrara elementos, dinámicas y relaciones que no encuentro en otro lado, si no me sintiera lo suficientemente apegada a su historia y sobre todo a sus personajes, como bien sucede aquí. Porque ya lo he dicho alguna vez por acá: soy más de personajes que de trama, si los personajes me gustan y/o me atrapan puedo aceptar una trama mediocre (no estoy diciendo que este sea el caso).

Y sí, me encantan los personajes de The Magicians, incluso los secundarios; incluso a los que cuya inclusión no les vi sentido en un principio y terminaron gustándome mucho (Fen<3). Es cierto que inicialmente me costó apreciarlos, pero ahora adoro al 100% lo desastrosos, complicados, imperfectos, defectos andantes y sobre todo humanos que pueden llegar a ser, porque todo ello los hace interesantes, dinámicos, que estén en constante crecimiento/cambio/desarrollo, que sean impredecibles y no te aburra verlos/seguirlos episodio tras episodio.

Y lo mejor de todo: a diferencia de lo que pasa con los libros, no terminas detestándolos (aunque sé que podrá no ser el caso de todos, pero a estas alturas yo aprecio mucho a toda esta panda de deslumbrantes y emocionalmente inestables miserables mágicos y/o constantes desastres humanos), lo que hace que espere con entusiasmo saber lo que el destino le deparará a cada uno de ellos (y por destino quiero decir una sala de escritores que disfruta torturando a sus personajes y por lo tanto a nosotros).

También de algún modo me ha hecho reflexionar mucho sobre personajes desagradables, o personajes que cometen actos/presentan comportamientos desagradables. "Cada vez que alguien hace una pregunta sobre likeability (simpatía), deberías redoblar lo que estás haciendo con ese personaje porque eso significa que realmente está actuando como un ser humano", comenta Sera sobre el tema. Y creo que esto se refuerza con un diálogo en la primera temporada que se da cuando Penny mira por primera vez los libros que contienen las historias de vida de cada persona, y al hacer el gesto de abrir el suyo Zelda, la bibliotecaria, le advierte que la gente que lee sus libros a menudo descubre que no les gusta el personaje principal. Auch.

Pero es indudable que se necesita cierta habilidad para lograr construir personajes imperfectos y humanos sin que la audiencia termine detestándolos por completo al punto de querer cambiar de canal, y vaya que la mayor parte del tiempo The Magicians-serie lo logra. También lo que ayuda en comparación con los libros es que rápidamente se vuelve una historia de ensamble, podríamos seguir considerando a Quentin el protagonista pero realmente el foco está en todo el grupo, convirtiéndose más bien en algo coral y no limitándonos a la perspectiva de éste.

Otra cosa importante y que creo que la aparta de otras series de su género es que encuentra el balance perfecto entre tocar temas serios/explorar lugares escabrosos y al mismo tiempo no tomarse a sí misma muy en serio. Es difícil de explicar, pero es muy consciente de sí misma en cuanto a que sabe cómo utilizar el ridículo y lo grotesco a su favor sin sacrificar el drama ni la profundidad de éste. Logra ser ingeniosa e hilarante sin caer en un absurdo simple y vacío (y cuando es absurda es deliciosamente absurda, y lo sabe). Y eso sumado a 1) diálogo chispeante, lleno de sarcasmo, sass y referencias a la cultura popular; 2) números musicales ocasionales; 3) un uso maravilloso y formidable de la bella palabra fuck y 4) autoreferencias casuales y frases que fuera de contexto suenan hilarantemente sin sentido, forma un tono singular que se siente diferente a todo lo que hay ahora mismo en televisión dentro de su género (¿bueno o malo? cuestión de gustos, a mí en lo personal me fascina, ¿no ven lo obsesionada que estoy?).

La one-liner por excelencia: Margo fucking Hanson <3

Y finalmente está el elemento fantástico-mágico. Me gusta cómo nos ofrece esta visión adulta-millennial de gente que puede utilizar magia en nuestro mundo, principalmente ubicándonos en un escenario de escuela superior donde se enseña magia, a la par que nos sumerge en la existencia de una especie de fucked up Narnia. Es un worldbuilding de lo más entretenido e incluso novedoso (aunque a simple vista no lo parezca), fresco, lleno de posibilidades. Sin embargo, la mayor cualidad de The Magicians reside en que no permite que el peso de la historia recaiga en los hombros de éste, porque aquí el conflicto siempre se siente personal, es una historia de personajes; y porque a fin de cuentas los momentos más mágicos y poderosos de esta serie se construyen teniendo lo fantástico más bien como telón de fondo, apoyándose y tomando fuerza en lo real y verdaderamente humano.

Peaches and plums, motherfucker.